Me he resistido a comprarle aguacates a ese aluvión de haitianas que pasa por mi casa, no por racismo, sino, por puercas. El pobre viejo que me vende las frutas, hace tres días que no pasa.
Le pregunto a una señora del vecindario, y me entero de que hace dos días, murió de una trombosis: El infeliz, tenía casi 90 años. ¿Qué hacía ese pobre anciano en la calle, y no en un hogar de ancianos donde pasaría su vejez tranquila y sin sobresaltos?
Como siempre me gusta hablar con ese tipo de personas, un día le pregunté:
_ Amigo, pero usted no descansa, no manca un día sin salir a vender sus frutas. ¿Por qué no descansa aunque sea un día a la semana?
Me contestó primero con una pregunta, y luego se explicó:
_ Y qué otra cosa podría hacer yo?
_ ¡Mire marchante, es que yo no tengo familia, por eso tengo que matarme empujando este carrito tan "pesao", hasta los domingos. Soy diabético, y con esto es que compro mis medicamentos y mi comida"
Yo me pregunto, ¿Y es que es tan difícil para el gobierno, sacar a ese tipo de personas de las calles? Yo creo que, así como la policía hace redadas para sacar maleantes de las calles, así mismo podría el gobierno hacer un plan decente y humanitario para convencer a estas humildes personas a que dejen las peligrosas calles del país.
Evitarles a esos ancianos, el sufrimiento de andar calle arriba y calle abajo buscando centavos para poder sobrevivir, además de evitarles el estar expuestos a tantos delincuentes callejeros. La vaina es que, no hay planes de gobierno para nada en este maldito batatal con luz, al cual solemos llamarle dizque país, que no sea robar, robar y más robar.
Este señor, un día me dijo que en dos ocasiones, había sido atracado en la calle y despojado de $320.00 en la primera, y de $400.00 en la segunda, producto de las ventas del día. ¿Sabe el gobierno lo que es, andar por las calles empujando un armatoste lleno de frutas, bajo las inclemencias de un sol abrazador, buscando cheles para comprar un par de plátanos y una sardina para comer por lo menos, una vez al día?
Sí, el gobierno lo sabe, solo que ese tipo de personas no está en sus planes, a esos solo los usa el día de las votaciones, porque con $200.00 y un pica pollo queda todo resuelto. Ese viejito que murió ayer, también forma parte de los más de un millón que el presidente dijo que sacó de la pobreza, claro está, porque lo mató, como ha hecho con el resto del dichoso "más de un millón sacados de la pobreza” con su ineptitud para gobernar este país, entre otras "cosas", "cositas" y "cosotas", que él conoce y que sabe hacer muy bien..
Los mató, porque los miles de millones de pesos del presupuesto nacional que debieron ir a los planes sociales para beneficiar al pueblo, fueron a parar a las cuentas bancarias de los funcionarios del gobierno, de los miembros del partido en el poder, y a las cuentas de sus allegados, incluyendo empresas extranjeras como Odebrecht.
Otro día, ese infeliz vendutero me dijo que, fue asaltado en el cuartucho que tenía como vivienda, y luego tuvo que coger unos cuantos pesos prestados para poder comprar frutas para revenderlas.
Amigo lector, analiza esta, que es una de cientos de miles de historias similares que, en estos momentos, tenemos en el país y verás hacia dónde te llevarán tus propias conclusiones, pero el pueblo te ruega que hagas lo que te exigen tus propias conclusiones.
Es una cruda radiografía de hacia dónde va este país, de la mano de corruptos inhumanos, que en vez de hacer una planificación social que ubique a los sectores más desfavorecidos y trabajar a favor de ellos. Pero contando con un gobierno que se le importa todo, que lo suyo es amasar dinero y cobrar impuestos, pues nos jodimos todos. Estos indolentes, algún día pagarán todas sus fechorías, y esperamos que esto sea pronto, por el bien del pueblo.
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