Por Henry Osvaldo Tejeda.
He leído que en grandes ligas, se supo que un equipo hizo usó de la tecnología para detectar las señas que el receptor de un equipo contrario le hacía a su lanzador para poner en conocimiento del bateador el lanzamiento que ambos habían acordado lanzarle. Para que esta fea situación no pueda ser posible que pase de nuevo, se me ha ocurrido la idea de algo infalible que evite este acto tan ilegal y malsano en el beisbol. Es algo que es sumamente secreto y mucho más seguro, o sea, ubicar a una mujer de enormes tetas en un lugar de las gradas, es decir, en una área de palcos exactamente detrás del receptor de manera que ella, tenga una visión frontal del montículo del lanzador con sus grandes senos al aire que puedan ser vistos de
forma clara y nítida desde el dogout del equipo que la contrató.
Esa mujer de tan grandes atributos teteriles, sería la que le pida al pitcher el tipo de lanzamiento que deberá hacerle al bateador de turno, claro está, si es que el lanzador lo aprueba o no, pero eso no es problema porque siempre se pondrán de acuerdo, pero la decisión del lanzador será la que debe prevalecer, si es que no le dan una contraorden desde el "dogout" porque dentro del mismo, habrá otra persona que conoce al dedillo cada una de las señales de que da la mujer desde las gradas con sus tetas, es decir, la señal que lleva cada lanzamiento. Esa persona, estará dotada de un potente catalejos capaz de verle hasta las pecas que tiene la mujer en sus pechos, y mientras dure el juego, esa persona tendrá ese catalejo enfocado directamente hacia las tetas de la mujer de las gradas, y luego de conocer ya el lanzamiento que acordó la mujer con el lanzador, se lo comunicará oralmente al receptor, quien a su vez, lo recibirá a través de un audífono miniatura de alta fidelidad y muy bien disimulado entre las orejas, no vaya a ser que el "ampalla" se dé cuenta y se arme la del perro bolo.
Dije que el lanzador, es quien tiene la decisión final de lo que va a lanzar, pero esto no es del todo así, porque si el señor que está en el "dogout" decide imponer su autoridad al lanzador, le dirá a este lo que de antemano, tanto él como el receptor ya saben que lo que diga ese señor, es lo que se va a lanzar. Para tal efecto, y para que el lanzador no se confunda y se ponga a tirar lo que le dé la gana, el receptor se pondrá de pie y se rascará las nalgas; con eso quedará todo claro y no habrá perdedera posible. En fin, con esa mujer en las gradas
es imposible que el equipo contrario pueda darse cuenta del tipo de lanzamiento que el receptor y el lanzador han acordado. Es una muy buena medida, porque, tanto el lanzador como la persona que está en el "dogout", se pasarán la noche deleitándose mirando a esa mujer con un juego de tetas que, aunque sea simplemente para emitir señas tetíferas, no dejan de ser movimientos sensuales. El lanzador estará contento mientras dure en el montículo, porque sus pensamientos siempre estarán en meter "su propio empeño" en el mismo "centro". Dudo mucho que este sistema de "brecheo" beisbolístico sea descubierto, pero si eso llega a suceder, hasta yo con esta habladera de tantas plumas de burros estaré “cogío por el pichirrí. Esa diva en las gradas metiendo esas dos "sandías" en el juego, no llamará la atención del equipo contrario más que para que se hagan "cocote" con ella; nadie sospechará su verdadero papel en el juego pensando que ella solo busca "vitrina", pues son demasiadas de esas, las que van al play.
Olvidaba decir que, esa mujer, debe ser sustituida por otra cuando el equipo contrario sea distinto, para así evitar las sospechas; ella, solo trabajará en ese mismo estadio, y se le reservará por toda la temporada el asiento detrás del catcher. Para los demás estadios, se
hará lo mismo con otras mujeres que ,serán escogidas mediante un casting secreto, preferiblemente, entre familiares de los dueños del equipo. De todas esas mujeres, solo se escogerán las más tetonas, y si entre ellas no las hay tetonas, se les enviará a un cirujano plástico para que este les haga un par esas cosas del tamaño de una sandía. Una mujer de tetas pequeñas, no sirve para ese trabajo porque se puede perder un juego, pues si el hombre que está en el "dogout", no ve bien hacia qué lado se movió una de las tetas de la mujer, y el lanzador, en lugar de una recta lanza una güevita, le puedan dar un guamazo que los haga perder el juego; tampoco el observador del "dogout" puede ser cegato.
jueves, 16 de enero de 2020
lunes, 13 de enero de 2020
EL PROBLEMA DE LOS POLÍTICOS QUE SE CREEN SERIOS ANTES Y DESPUÉS DE TERCIARSE "LA ÑOÑA"
Por Henry Osvaldo Tejeda
El mejor aporte que un presidente en el poder le puede hacer a la democracia de su país, es saliendo del gobierno cuando pierde, y entender que tiene que abandonar con donaire el gobierno porque perdió, pero aquí, han convertido en tradición que, los políticos, desde que son aspirantes; simples candidatos a la presidencia, ya tienen la mente preparada para quedarse hasta que las ganas de seguir se les quite, cosa esta que nunca ocurre aunque él sea detestado y aborrecido por el pueblo. En la mayoría de los casos
esto ya va ligado a la corrupción y al contubernio con los poderes fácticos, que invierten grandes sumas de dinero en candidatos con reales posibilidades de ganar, para cobrarse luego la inversión cuando estos llegan al poder. Se puede decir también que, la miseria humana de los políticos está ligada a también a ese tan grande y viejo problema nacional. La mayoría de ellos dicen ser honrados, dignos, honestos y que nunca en su vida podrían cometer ninguna acción que envilezca su moral y sus buenas costumbres, y hasta mencionan la honestidad y el prestigio de su familia, pero eso es pura mentira, ya que, el gen de la delincuencial lo llevan desde que nacen, y la presidencia, solo los ayuda a descubrirlo poniéndoselo de manifiesto, y ya que se dieron cuenta se olvidan de lo que creían ser, y es cuando siguen dando rumba abierta sin pensar en que, en el momento menos pensado, pueden ir a dar con sus huesos a una cárcel, pero aún lo piensen, no les importa porque, con la fortuna malhabida que están sacando del estado, pueden comprar hasta su libertad. ¡Craso error! El instinto angurrioso y de maldad lo llevan dentro de si, al igual que el alacrán lleva su instinto de picar.
Cuando el presidente aprenda que, cuando pierde ya perdió, y que tiene que irse para su casa entonces, el país podrá trillar el verdadero camino del desarrollo moral, social y económico y no el falso bienestar que difunden a través de los medios de comunicación comprados para distorsionar la realidad del país. Esas bonanzas que fututean por doquier, solo está en su cabeza y en sus ganas de perpetuarse encima del palo.
Hay presidentes que empiezan bien, y tal vez desean terminar bien, pero se van torciendo a medida que van haciendo diabluras durante su mandato, para terminar haciendo lo que la gran mayoría hace, tratar de quedarse para siempre en el puesto porque saben que han hechos barbaridades en contra del pueblo y saben también que si pierde, irán a parar a un calabozo; claro está en un calabozo de países con el nuestro, pero en los países que se respetan, estos pueden ser fusilados donde existe la pena de muerte; en los países donde esta no existe pero que también se respetan como sociedad decente, el sujeto, puede no ver jamás la luz del sol..
El mejor aporte que un presidente en el poder le puede hacer a la democracia de su país, es saliendo del gobierno cuando pierde, y entender que tiene que abandonar con donaire el gobierno porque perdió, pero aquí, han convertido en tradición que, los políticos, desde que son aspirantes; simples candidatos a la presidencia, ya tienen la mente preparada para quedarse hasta que las ganas de seguir se les quite, cosa esta que nunca ocurre aunque él sea detestado y aborrecido por el pueblo. En la mayoría de los casos
esto ya va ligado a la corrupción y al contubernio con los poderes fácticos, que invierten grandes sumas de dinero en candidatos con reales posibilidades de ganar, para cobrarse luego la inversión cuando estos llegan al poder. Se puede decir también que, la miseria humana de los políticos está ligada a también a ese tan grande y viejo problema nacional. La mayoría de ellos dicen ser honrados, dignos, honestos y que nunca en su vida podrían cometer ninguna acción que envilezca su moral y sus buenas costumbres, y hasta mencionan la honestidad y el prestigio de su familia, pero eso es pura mentira, ya que, el gen de la delincuencial lo llevan desde que nacen, y la presidencia, solo los ayuda a descubrirlo poniéndoselo de manifiesto, y ya que se dieron cuenta se olvidan de lo que creían ser, y es cuando siguen dando rumba abierta sin pensar en que, en el momento menos pensado, pueden ir a dar con sus huesos a una cárcel, pero aún lo piensen, no les importa porque, con la fortuna malhabida que están sacando del estado, pueden comprar hasta su libertad. ¡Craso error! El instinto angurrioso y de maldad lo llevan dentro de si, al igual que el alacrán lleva su instinto de picar.
Cuando el presidente aprenda que, cuando pierde ya perdió, y que tiene que irse para su casa entonces, el país podrá trillar el verdadero camino del desarrollo moral, social y económico y no el falso bienestar que difunden a través de los medios de comunicación comprados para distorsionar la realidad del país. Esas bonanzas que fututean por doquier, solo está en su cabeza y en sus ganas de perpetuarse encima del palo.
Hay presidentes que empiezan bien, y tal vez desean terminar bien, pero se van torciendo a medida que van haciendo diabluras durante su mandato, para terminar haciendo lo que la gran mayoría hace, tratar de quedarse para siempre en el puesto porque saben que han hechos barbaridades en contra del pueblo y saben también que si pierde, irán a parar a un calabozo; claro está en un calabozo de países con el nuestro, pero en los países que se respetan, estos pueden ser fusilados donde existe la pena de muerte; en los países donde esta no existe pero que también se respetan como sociedad decente, el sujeto, puede no ver jamás la luz del sol..
jueves, 9 de enero de 2020
VIVENCIAS EN LA ROMANA: UNA FASTIDIOSA NOCHE EN EL CINE
Creo que para hacer
esas "obras de arte", el artista compra una lata de Pidoca y la
bombea de golpe en el lienzo y, ¡Zas!, ahí está la vaina, dispuesta para la
venta por miles y miles de pesos. Luego, con aquel aire de príncipe, el pintor
empieza a detallar lo que significa cada trazo de la pintura. Si soy yo que
hago eso en mi casa, hasta el divorcio me pide la mujer por asqueroso
embarrador de paredes. Si yo fuera un pintor de esos que hacen crean pinturas
abstractas, hiciera lo que siempre hice desde niño, coger dos trozos de
mosaicos, untarles lodo fino o cemento de esas mezclas que hacen los albañiles para empañetar y luego los pegaba,
y al despegarlos de golpe, aparecían unas figuras rarísimas que uno podía
interpretar que eran lo que a uno les diera la gana que se parecieran. O tal vez, miraba hacia el cielo en un día claro con nubes bien claras y fáciles de
interpretar. No creo que haya habido niño, al que una nube cualquiera no se le
pareciera a cualquier cosa, incluso, hasta a un tío, un mulo, un perro, un viejo, etc..
_ ¿Por qué esa mujer no se divorcia de ese pendejo?" y
dirigiéndose al vecino, quien supongo que era su esposo, le dijo: "El día que yo
sepa que me has hecho algo así, te mato en la primera vuelta".
En una escena, el
actor cuernero, va por una calle oscura y le cayeron a golpes como cinco
hombres, lo asaltaron y lo dejaron maltrecho; ahí mismo dijo la mujer de al
lado:
_"Asimismo, denle
duro al maldito, denle por abajo pa'que sufra ese canalla, yo sabía que algo
tenía que pasarle, el que la hace la paga", y dirigiéndose al esposo
decía: "Ve cogiendo apuntes, porque te estoy acechando no creo que llegues
ni a la primera vuelta, desde que sepa algo te doy tu "Rilí".
_Ah bueno, ahora si me jodí, toy mirando una
porquería de película y además de eso, tengo que ponerme un zíper en la boca
porque a este sujeto le molesta que abra el jooico pa´comentá esta ñeca de película.
Sepa Ud. señor que, esta boca es mía y pagué mis malditos cuartos pa'decír lo
que me dé mi maldita gana.
¡Pero qué joder y no amanece! ¡Siéntese en otra silla si le molesta lo que digo y hago! Fue lo que hice, me senté en otra fila. En eso, la mujer del actor principal, conoce a un tipo que empieza a cortejarla y ella, muy recatada, le dijo que era casada y que no podía serle infiel al marido, bla, bla, bla. Ahí fue cuando mi ex vecina dijo:
¡Pero qué joder y no amanece! ¡Siéntese en otra silla si le molesta lo que digo y hago! Fue lo que hice, me senté en otra fila. En eso, la mujer del actor principal, conoce a un tipo que empieza a cortejarla y ella, muy recatada, le dijo que era casada y que no podía serle infiel al marido, bla, bla, bla. Ahí fue cuando mi ex vecina dijo:
_ Pero mujer del
demonio, hazle caso a ese hombre, no ves lo bueno que tá ese malvao?" ¡Pero qué mujercita mas pendeja; si soy yo, me lo jondeo al tiro.
_ ¡Váyanse ustedes, yo pagué
mis cuartos y hasta que esta porquería de película no se acabe no me voy!, y en
cuanto a ti (dirigiéndose al esposo), allá en la casa seguimos hablando
de" ¡¡¡Aayyy!!... No pudo seguir
hablando, el golpe que se oyó, parece que le hizo tragar la lengua. La mujer
salió "desgaritá", prácticamente brincando los asientos, mientras el
hombre le decía: ¿Qué te habías creído carajo? - Crees que voy a seguir
aguantándote vainas delante de las gentes, indecente, es en el cine que estás,
esto no es la gallera, ¿quién te dijo que eras narradora de películas?
domingo, 5 de enero de 2020
EL MURAL DEL PADRE LUIS EN LA PUERTA PRINCIPAL DE LA IGLESIA DE OCOA, CON LA FIGURA DE UN NIÑO CAMBIANDO LA PALABRA PAZ POR PAN.
Henry Osvaldo Tejeda Báez
El tema de este corto trabajo, lo abordo hoy porque, de haber tenido conocimientos antes del mismo, lo hubiera reallizado antes.No lo había tratado antes, porque tengo varios años que no voy a mi querido pueblo de Ocoa, y no sabía que en el 2015, según pude leer, ese mural, había sido colocado de nuevo, pero no en la puerta principal de la iglesia donde originalmente lo colocó el padre Luis Quinn, sino, en el ala este del edificio ¡Ahora, vamos a mi pleito!
Tanto el que quitó ese mural de la puerta de la iglesia, como el que luego de tantos años de la muerte del padre Luis colocó una fea réplica de forma tan mal hecha, que no es más que un ridículo, cínico e irreverente, además de envidioso, entre otros calificativos que se merece. Esa persona, un cura tuvo que haber sido, quien decidió colocar en un rinconcito del frente de la iglesia muy poco visible y sin la menor intención de que la gente lo note, el mural que identifica lo más hondo del pensamiento del padre Luis. Un letrero con colores opacos, raro, feo y muy diferente al ya famoso mural del Guayacán. La figura del niño no se nota a varios metros de distancia, hay que acercarse para poder verlo porque el color de la piel que le pusieron no contrasta con el del fondo del mural. Y ¿Qué decir cuando alguien, especialmente, un turista o cualquiera que se le antoje tomar una foto desde la acera del parque? No se aprecia nada del niño, y mucho menos se sabe cuál es el mensaje que El Guayacán quiso llevar al las personas que lo vieran. Eso es una irreverencia y una gran afrenta a la memoria de ese grande hombre que fue nuestro Guayacán. Si es que quieren hacer algo que no sea risible, que la gente vea que lo hacen en honor al Padre Luis y por lo que tanto más luchamos para que lo colocaran de nuevo en su lugar de origen, o sea, en la puerta principal de la iglesia, por lo menos, debieron hacer algo similar al original dándole otros colores más llamativos, o con el mismo que antes tenía, porque me parece de mala fe que le pongan un color verde oscuro y colocarlo en un lugar donde hay vegetación verde oscura que le quita visibilidad; es un perversidad. En el lugar que está, amerita que el tamaño le sea aumentado y buscar colores en los que haya contraste entre el fondo, con el texto y con el niño.
Les recuerdo que, la colocación nuevamente de ese mural en donde estaba antes, fue un reclamo que hice mil veces en todas las redes sociales, escribí artículos, llamé al alcalde Aneudy Ortiz para que gestionara su colocación aunque fuera en el mismo parque, porque ese letrero con tan profundo mensaje, no podía desaparecer de ahí.
Recuerdo que le hablé al senador Pedro Alegría, quien luego me sorprendió al mandar a pintar una réplica del mural en la misma entrada de Ocoa, con unas enormes letras que se pueden ver desde 300 metros de distancia, algo asombroso, que dio lugar a que yo lo escogiera como imagen de perfil para el grupo SOMOS DE OCOA. Eso, fue un gesto que habla muy bien de Pedro, y si me dirigí a él para expresarle mi preocupación, fue por yo sé de su amor y respeto por el padre Luis que, dicho sea de paso, siempre lo ayudó en sus proyectos, y estuvo a su lado en los peores momentos de la vida del Guayacán. Pëdro Alegría, estuvo a su lado con su mano amiga en el hospital de Miami al momento de que el padre Luis fue operado de corazón abierto, y donde murió luego de la misma. Esos reclamos, los hice al darme cuenta de que un cura, supongo que por envidia o por verse frente a un pueblo que podía esperar de él una actuación como la del Guayacán y que sabía que no estaría a su altura, retiró el mural de la puerta de la iglesia luego de fallecer el padre Quinn.
No sé qué fue lo que se le metió a ese cura, pero lo que en esos momentos pensé fue lo que aún hoy sigo pensando; que ese cura que sustituyó al Guayacán, al ver que no se podía calzar unos zapatos que le quedaban grande decidió borrar cosas que él creyó manendrían al pueblo pensando en el padre Luis. Tal vez estoy exagerando, pero que, no había la necesidad de quitar ese mural tan significativo de ahí, solo porque a él se le antojó quitarlo. Claro, a menos que la rancia jerarquía católica le hubiera ordenado que tratara de borrar de la mente del ocoeño los ideales revolucionarios del padre Luis; no dudo nada ya, porque esa iglesia no dejará nunca de ser lo que ha siempre ha fue, la enemiga múmero uno del pobre, complaciente con la oligarquía y con la explotación de los pueblos. Recuerden que, la iglesia católica, por sugerencias de lo peor del partido reformista de nuestro Ocoa, en los tiempos de los doce años de Balaguer, ellos quisieron echarlo del pueblo, y que no se les dio porque el rechazo de la comunidad. Espero que sean indulgente conmigo, pero lo que ví en ese letrero tan poco legible y arrinconado, me dio coraje.
El tema de este corto trabajo, lo abordo hoy porque, de haber tenido conocimientos antes del mismo, lo hubiera reallizado antes.No lo había tratado antes, porque tengo varios años que no voy a mi querido pueblo de Ocoa, y no sabía que en el 2015, según pude leer, ese mural, había sido colocado de nuevo, pero no en la puerta principal de la iglesia donde originalmente lo colocó el padre Luis Quinn, sino, en el ala este del edificio ¡Ahora, vamos a mi pleito!
Vista del letrero original, colocado en la puerta principal de la iglesia de Ocoa por el padre Luis Quinn. Por su nitidez, se podía leer desde lejos. |
Este es el mural actual. No hay forma de que el niño se pueda ver con claridad. No se ve bien ni la N" final, ni el niño doblando la "Z", ni cuando se fue (Al final). |
Recuerdo que le hablé al senador Pedro Alegría, quien luego me sorprendió al mandar a pintar una réplica del mural en la misma entrada de Ocoa, con unas enormes letras que se pueden ver desde 300 metros de distancia, algo asombroso, que dio lugar a que yo lo escogiera como imagen de perfil para el grupo SOMOS DE OCOA. Eso, fue un gesto que habla muy bien de Pedro, y si me dirigí a él para expresarle mi preocupación, fue por yo sé de su amor y respeto por el padre Luis que, dicho sea de paso, siempre lo ayudó en sus proyectos, y estuvo a su lado en los peores momentos de la vida del Guayacán. Pëdro Alegría, estuvo a su lado con su mano amiga en el hospital de Miami al momento de que el padre Luis fue operado de corazón abierto, y donde murió luego de la misma. Esos reclamos, los hice al darme cuenta de que un cura, supongo que por envidia o por verse frente a un pueblo que podía esperar de él una actuación como la del Guayacán y que sabía que no estaría a su altura, retiró el mural de la puerta de la iglesia luego de fallecer el padre Quinn.
No sé qué fue lo que se le metió a ese cura, pero lo que en esos momentos pensé fue lo que aún hoy sigo pensando; que ese cura que sustituyó al Guayacán, al ver que no se podía calzar unos zapatos que le quedaban grande decidió borrar cosas que él creyó manendrían al pueblo pensando en el padre Luis. Tal vez estoy exagerando, pero que, no había la necesidad de quitar ese mural tan significativo de ahí, solo porque a él se le antojó quitarlo. Claro, a menos que la rancia jerarquía católica le hubiera ordenado que tratara de borrar de la mente del ocoeño los ideales revolucionarios del padre Luis; no dudo nada ya, porque esa iglesia no dejará nunca de ser lo que ha siempre ha fue, la enemiga múmero uno del pobre, complaciente con la oligarquía y con la explotación de los pueblos. Recuerden que, la iglesia católica, por sugerencias de lo peor del partido reformista de nuestro Ocoa, en los tiempos de los doce años de Balaguer, ellos quisieron echarlo del pueblo, y que no se les dio porque el rechazo de la comunidad. Espero que sean indulgente conmigo, pero lo que ví en ese letrero tan poco legible y arrinconado, me dio coraje.
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