LA CONVERGENCIA Y SUS POSIBLES BEMOLES

Por Henry Osvaldo Tejeda

 La mayoría de los partidos de oposición, están ahora en aprestos reorganizativos. El Dr. Moreno está activo al frente de su partido, Alianza País. La verdad es que, aunque yo haya sido el pionero con este asunto de la convergencia, no estoy tan convencido de que la misma pueda llegar a buen término porque conozco bien la idiosincrasia del político dominicano.

Todos quieren ser presidente del país, uno, que no da un paso atrás para cederle el paso a otro aunque reoconozca en ese otro tener mejores condiciones que él, porque cree que tiene ganado el espacio.

No dudemos de que, en cualquier momento, se destape un Hipólito, un Abinader,  un Esquea  u otro dirigente del PRM  diciendo que ellos, son los que cuentan con más seguidores y que, por tanto, son ellos los que deben liderar la Convergencia. Esa posición, puede causar ronchas y agrietar unas posibles relaciones entre los convergentes.

Es indudable que, los mejores candidatos están en los partidos minoritarios, que aunque no tienen gran militancia, tampoco tienen cola que les pisen y eso es ahora bien importante porque el pueblo anda buscando gente honesta para llevarla al poder por estar hasta la coronilla de tantos engaños.

En la facción de Hipólito y Abinader, es que está la gran mayoría de seguidores  militantes de oposición, pero Guillermo Moreno le adorna un aura (también Celeste) de honestidad y verticalidad, además de un discurso que te dice claramente, qué es lo que quiere y hacia dónde quiere llevar al país.

Guillermo Moreno tiene la ventaja de que, lo pueden seguir hasta los peledeístas disgustados, y más aún, si es Leonel el que se alza con la candidatura presidencial de su partido, por el gran rechazo que este tiene tanto en lo interno de su partido, como fuera de él.

De todas formas, veremos a ver qué pasa, puede suceder que, aunque sea una vez en su vida, los políticos actúen de manera sensata y se den cuenta de que el candidato debe ser escogido de manera consensuada.

Así se vería más decente y los perdedores, necesariamente, acatarían dócilmente, lo decisión mayoritaria, aunque a uno que otro, le salga su rabieta. Es normal.

Tengo toda mi fe en que, el barco convergente, llegue a buen puerto por el bien del país porque ya no soportamos más esta banda de atracadores en el poder.