domingo, 25 de junio de 2017

Dos bandos ciegos en la Venezuela desangrada

Por Henry Osvaldo Tejeda B.

Nicolás Maduro, debe ser sacado del poder por sus mismos compañeros, o irremediablemente, el poder va a caer en las manos de los mismos partidos que mantuvieron a Venezuela en la más execrable de las miserias durante varias décadas repartiéndose el poder, y dándole su cuota a los del Norte. 

No sé si habrá antecedentes de esto pero, no creo que alguna vez se haya visto que la oligarquía de un país, haya tomado en sus manos las protestas callejeras de un pueblo sufrido, si son precisamente ellas las que han explotado y han causado las peores miserias y los sufrimientos de sus pueblos?  

Entonces, como hemos visto ya en Venezuela, es la oligarquía la que está aprovechando la indignación del pueblo, y a la vez acicateándolo para que ese país se desangre y poder ellos terminar cogiendo los mangos bajitos; ya sabemos aquello de pescar en "río revuelto". 

Una  parte del pueblo no repara en eso, y si lo sabe tampoco le importa porque lo único que le interesa ahora es salir de Maduro,  con toda las  razones del mundo ya que este carajo no sabe lo que tiene entre manos, pero sí es sabedor de su poderío militar y de la mitad de los pobres del país, y eso lo ha envalentonado al máximo y con su prepotencia e intolerancia, la única solución que tiene es la de tirar las milicias (colectivos civiles, y el ejército nacional) a la calle a matarse con sus hermanos. 

En su torpeza, Maduro dejó que la situación se desbordara y es por eso que cada vez que se inventa dejar una  "mínima brechita"  para "dialogar" sobre la situación, ya el pueblo no le cree ni se la acepta porque en ninguna de esas brechas se habla de que él debe abandonar el poder. 

Maduro debe ser echado, o renunciar, porque solo así, puduiera irle menos mal, y tendría la ventaja de que dejaría en el poder a su vice presidente, o en su defecto, a una persona que su gobierno proponga pero que sea aceptada  por los negociadores de la oposición, y es hasta  posible que la revolución bolivariana no muera, que es lo que se avizora de seguir este terco e inepto hombre en el poder. 

Pero nada de eso es tan posible que pueda pasar, porque, aunque al pueblo le guste -a medias- esa posible solución momentánea, la oligarquía va a insistir y a seguir creando las bases para que eso no pueda haber un advenimiento de solución del problema, y no va a dejar que eso se dé, pues lo que buscan es el poder "pura y simple" a sangre y fuego, aunque tengan que desgarrar las entrañas de Venezuela como ahora está pasando..

Esa oligarquía sin hiel, quiere tenerlo todo como en los tiempos en que se repartieron el poder por decenas de años los copeyanos y demócratas, manteniendo al pueblo en la extrema pobreza.

Los cabecillas de las protestas deberían pensar en frío este asunto, porque es como un axioma que,  las oligarquías latinoamericanas nunca les han asegurado bienestar a sus pueblos, y todos sabemos por qué. 

Soy de la idea de que, solo buscando la integración de la parte excluida de Venezuela con la otra parte, es decir, los que Chávez sacó de la pobreza, podría algún día retornar la normalidad a ese país, aunque reconozco que eso será un camino muy difícil de recorrer por las razones ya expuestas.

Eso no será posible, mientras la oligarquía de ese país esté manejando a los cabecillas y líderes naturales del pueblo, sobre los que ejece toda su influencia, y a los que empujan constantemente a estar movilizándose en las calles y haciendo todas clases de las diabluras que hacen los pueblos cuando están indignados por los abusos a lo que son sometidos, y cegados de  impotencia ante un enemigo superior en fuerzas y recursos.

A esa oligarquía venezolana, no le importa si el pueblo se desangra en las calles, porque lo más seguro es que entre los muertos, no aparezca nunca un solo de sus familiares y si las cosas se ponen más feas de lo previsto por ellos, solo tienen que comprar un vuelo urgente hacia Miami, y al resto de los venezolanos, que se jodan. 

Eso es lo que deben ponerse a observar los líderes naturales de la oposición a quienes la oligarquía están forzando al máximo para seguir con las cada vez más sangrientas protestas callejeras, para que la situación llegue a un extremo tal que, a los "Del Norte", se les abra su impenitente apetito de invadir naciones, y hacerlo con esta vez con Venezuela. De una invasión y sus secuelas, los que siempre se ha beneficiado ha sido la oligarquía, porque ellibrito de l os gringos tiene establecido que, donde ellos invaden, solo puede quedar en el gobierno los que les son serviles; eso es lo que ha sucedido en nuestra América desde que nos dimos cuenta de que tenemos el ombligo y la barriga pa'lante. 

Que se sepa,  no defiendo a Maduro, por mí, que se lo lleve el mismo Diablo por inepto y prepotente. 



Resumen:
La única posible y mediana salida que le veo a ese conflicto, es que la "dirección" de la oposición del pueblo llano, intente por encima de la oligarquía "enchinchadora" la salida forzada de Maduro, y que se retorne a la mesa del diálogo entre el pueblo que quiere solución pacífica, y un nuevo presidente dispuesto a ceder ante el pueblo, y hasta es posible que con una actitud de verdadera disposición de resolver los  problemas sociales, ese presidente, hasta pueda salvar una revolución que fue pensada de forma tal que, si es bien aplicada, daría sus buenos frutos, porque fue ideada pensando en los pobres del país, sin dañar a los ricos sensatos y honrados, y si no se ha podido realizar a cabalidad, es porque esos ricos ni son honrados, ni son sensatos, sino, todo lo contrario.

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