Por. Henry Osvaldo Tejeda Báez.
Luego del discurso del presidente Danilo, en el que declinó sus aspiraciones de quedarse "subío en el palo" por cuatro años más, y en el que dijo también que el país necesita sangre nueva, ha sido el acabose, porque a solo horas de decir esas palabras, las clínicas de la capital y de gran parte del país se llenaron de peledeístas, especialmente, de funcionarios del gobierno que han visto el camino de sus aspiraciones de llegar al presupuesto nacional, se les ha despejado con esas simple palabras salidas de la boca de Danilo Medina, es decir, que "el país necesita ahora sangre nueva".
Danilo, dijo que el país necesita sangre nueva, dando a entender como que fue que se jartó de comer tiburones podridos, pero no fue esa "jartura" la causante de que a él se le quitara el apetito de seguir ordeñando y sacrificando el país, no señor, los motivos fueron muchos, especialmente, el no haber podido comprar los votos para modificar la tusa limpia fuiche ¡Pero, ..suuu manífica ni mameo!, ¿Y qué es lo que he dicho? No, no, perdón, me refería a la constitución dominicana, perdón, por eso de "tusa limpia fuiche".
Metí la para, al parecer, relacioné lo que tanto escucho de que la cosntitución es un pedazo de papel sanitario, y como soy pueblerino, pensé..bueno, pensé mal; lo siento!
Pues bien, aparte de que los votos no les dieron, se dio con un pueblo "encabronao", hastiado de tanto robo y corrupción que se lanzó a las calles a frenar sus nefastas aspiraciones, pero esas marchas y esa voceadera no le iban a hacer mella para que desistiera de sus deseos de fiera acorralada y borracha de poder, quedarse cuatro años más con la Ñoña, pero frenó de golpe cuando apareció algo que lo metió en miedo; fue la llamada atiemposa que le hizo un rubio del norte que masca chicle llamado Pompeo; esa llamada lo desinfló cuando ya se estaba por conocer su abuso en la cámara de los senadores.
Nervioso, el presidente, llamó a Reinaldo Pared y le contó el chisme; este, se sacudió el lodo y se mandó en una carrera hacia el palacio, dejando media suela de un zapato cuando dió un guaypon al coger la Jiménez Moya hacia arriba, doblando en la Independencia, pero antes de llegar al palacio, se paró en una farmacia donde compró 13 cajas de pastillas Lomotil, de esas que que el pueblo dice que es "un cuchillo para la churria".
Esa llamada fue la que aceleró el descalabro del satánico invento de violar la constitución, comprando diputados con los mismos cuartos del pueblo. Ahora el tema es, la sangre nueva y las caras nuevas, o sea que, este será el año en que los cirujanos plásticos, esos que que hacen tetas y nalgas nuevas a las mujeres, van a hacer su agosto poniéndoles caras de nuevas a los arrugaos aspirantes del PLD.Ahora se verán como los teenager (Tineger) de los sesentas.
Las palabras del presidente han causado un revuelo tal que, en todos los bancos de sangre del país, no hay una sola gota; se vendió como pan caliente de todos los tipos, porque los funcionarios, en su afán de llenarse de sangre nueva han acudido en turba a comprarla toda, pero el caos grande está en el frente de los centros donde hay aparatos de dializar, porque las filas son kilométricas.
Escuché una conversación, en la que alguien le preguntaba a uno de esos deportados el por qué, siendo ellos deportados por mafiosos y delincuentes quieren llegar al palacio nacional. La respuesta del deportado fue:
_ Pero mi pana, eso´e normal en ete tieto de paí, lo que se van del gobierno, son tan o má ratrero como nosotro, entonce, nosotro también tenemo derecho a montanos en el palo".
_ Pero mi pana, eso´e normal en ete tieto de paí, lo que se van del gobierno, son tan o má ratrero como nosotro, entonce, nosotro también tenemo derecho
a montanos en el palo".
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