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| Mi querida y añorada madre, Vinda Báez |
Hace días, un amigo me mostraba un video en el que unos mecánicos, por jugarle una broma a un compañero que recientemente había empezado a trabajar como aprendiz en el taller, se las ingeniaron para hacerlo pasar como un inepto y reirse de él.
Resulta que el carro no tenía motor y el aprendiz nunca había manejado un vehículo de esos y que no conocia los controles por lo que les dijo a los compañeros:
_ Pero yo no sé manejar ese carro, ustedes saben que soy nuevo aquí y vine a aprender, ¿por qué no lo prueba uno de ustedes?, dijo el angustiado aprendiz que, dicho sea de paso, era evangélico.
Tanto insistieron con el asunto de que tenía que ser él quien probara el carro, metiéndole el cuco de que, si no lo hacía se iba a ver muy feo ante el jefe y podría hasta ser echado del trabajo.
Ante tanta insistencia y el miedo a perder la chamba, el aprendiz decidió probar el carro. Temeroso, se montó en el carro ante la mirada burlona de sus compañeros, ellos sabían que al no tener motor el aprendiz iba a pasar un buen susto al no poder encenderlo. Hoy sería el día de reirse de verdad.
El aprendiz se encomendó a Dios (meta mensaje del video), colocó la llave y sin ningún problema "prendió" el carro y salió a probarlo hacia la calle.
Los compañeros no podian creer lo que estaban viendo, quedando con la boca abierta; había ocurrido un milagro.
Cuando le dijeron al aprendiz que todo era una broma, enseñándole que el carro no tenia motor éste exclamó: "Gracias Dios mío, sabía que me habías oido". "Tu lo puedes todo"
Ese era el meta mensaje, "Dios todo lo puede". No se imaginan el daño que le hacen a ese tipo de idiota poniéndole un ejemplo tan pendejo para llevarle ese "subliminal" mensaje.
Pero eso no sería nada, si le hacen ver que el ejemplo es sólo eso, un ejemplo, pero no, lo dejan bruto para que los idiotas crean semejante barbaridad.
Prueba de ello es que, cuando le pregunté a mi amigo (un joven de menos de 30 años) si él creía ese disparate; su respuesta no pudo ser más reveladora:
"Claro que lo creo, Dios todo lo puede". Fue lo que me dijo.
¡Chupe usted y déjeme el cabo!
Ahora comprendo el por qué, un grupito de tuertos políticos tienen pisoteados a todo un pueblo repleto de ciegos; que fácil es engañar a mi gente. ¡Una tragedia! ¡Una gran pena!
Estamos fritos per saecula seaculorum.
Comentario al márgen
Quiero dejar claro que no tengo nada contra los evangélicos; hace ya 25 años que mi madre murió, a la sazón, se desempeñaba como pastora de una iglesia evangélica que funcionaba en nuestra propia casa en San José de Ocoa; nunca le escuché contarles anécdotas, ni cuentos, ni disparatosos a sus feligreses.
Se limitaba a hacer el bien a todo el que sus fuerzas le permitían, y predicó siempre apegada a los mandatos de la Biblia que, aunque yo no compartía para nada esas cosas, siempre le respeté sus creencias, tanto a ella como a los feligreses que asistían a sus cultos en nuestra casa. incluso, fueron muchas las veces que les acompañé con mi guitarra a cantar sus coros.
Lo que me molesta es, las estúpideces que les están metiendo a la gente en la cabeza, disfrazadas de cosas reales. ¡Abusadores!
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