lunes, 16 de septiembre de 2013

LA NOTICIA Y EL ESTACAZO

En el día de hoy la Noticia será una sóla, por tanto, habrá un solo un Estacazo.



LA NOTICIA:

"Conductor mata de balazo en la cabeza a un "limpiavidrios"
 EL ESTACAZO:

Para empezar, no hay razón para que un maldito maniático cometa tal acción. Pero como digo una cosa, digo la otra;  hace tiempo que vengo diciendo que, tarde o temprano, esto iba a suceder. 

No hay que tener "boca de chivo" como dice el dominicano, para saber lo que va a ocurrir en el futuro, porque las políticas de los malos gobiernos tarde o temprano nos llevan a ser adivinos de "Crónicas de Muertes Anunciadas". 


No hay que ser magos para saber lo que aquí ha de ocurrir porque nos pasamos los años acumulando méritos para que pase lo que tiene que pasar.

Esa práctica de los chicos "limpiavidrios", de acercarse sigilosamente (a veces a la franca y a las malas), de arrojarle al parabrisas del vehículo un chorro de agua casi siempre sucia, más un trozo de colcha espuma mojada, pone al más sosegado de los mortales conductores fuera de sus cabales.

No vale que se les diga que no "limpien" lo hacen para obligarte, para que te sientas comprometido a "pagar por el trabajo".



Reitero, ese maldito que mató a ese jóven "limpiavidrios", debe ser ejecutado como lo hizo con ese chico y su cadaver expuesto en una plaza para escarmiento del que, en lo adelante, ose intentar algo semejante.

 Estas son situaciones que suceden día por día en todo el territorio nacional aunque en el 99% no se llegue al extremo de asesinar a nadie. 

Si cuando alguno de esos chicos, regularmente imberbes con cara y gesto de hombre termina de "limpiar" el cristal de tu vehículo y tu no les das nada, ya sea porque no tienes cambio o simplemente porque no le quieres dar nada por no ser obligatorio y mucho menos, si no has autorizado la "limpieza" del cristal, entonces te le hacen una raya que va desde una puerta cualquiera hasta el bumper, lo abollan, hasta te pinchan una goma y luego alejarse corriendo.



Esos infelices asumen, que usted debe pagarle por "su trabajo", no piensan que usted no los solicitó y que si los cinco, diez, o quince centavos que algunos les damos (lo digo por mi), lo hacemos no por "su trabajo" sino, porque vemos la desgracia retratada en sus rostros de niños/hombres; porque vemos el drama humano que viven y que no tienen un gobierno que se conduela de ellos porque los dineros que deben ser destinados a mejorarles sus vidas con planes sociales que los encaminen en la vida, van a parar a cuentas bancarias de los políticos ladrones.




He dicho decenas de veces, que el gobierno debe recoger a todos esos niños y ponerlos a estudiar, que se construyan instalaciones donde aprendan manualidades, entre tantos renglones de manufactura que existen y que a la vez estudien. En fin, un plan destinado a rescatar de la mugre a esa "carne salada que es el hormigón de la futura sociedad del país.



Pero como los gobiernos que nos ha tocado sufrir ni para eso sirven, entonces estamos condenados a ver dramas como el de ese joven muerto por un disparo. 

Mientras ese infeliz pensaba que se   ganaba la vida honradamente, su ingenuidad no le dejó ver que coqueteaba con la muerte. Para mi, ese joven es un cadaver más del gobierno y su política "no hacer nada" y de pasarle un paño con pasta a los problemas y de no iniciar las grandes transformaciones que necesita es país, y que tanto cacareó durante la campaña electoral.


En otro lugar de la ciudad, otros niños fueron premiados por graduarse de esto, de aquello, de lo otro, en un acto donde se gastaron todos los cuartos de chanflin, pero nada de mirar hacia abajo, hacia los excluidos, hacia los hijos del coquero, del vendutero, del maldito hijo de la gran puta ese que vocea todo el día hasta desgañitarse pregonando un producto que, si no lo vende hoy, ya mañana lo pierde si no se lo come. 
¡Hasta cuándo, coño!




Reitero una vez más, el asesino de ese niño debe ser ejecutado. Sería bueno  averiguar si el asesino es hijo de uno de los privilegiados  que se han creído que el país es de ellos; solo para saber. Punto

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