martes, 18 de septiembre de 2012

EL RINCÓN DEL ÑAME: ¡VAYASE AL CARAJO!



CARAJO, era como se le llamaba al espacio ubicado en la parte más alta de los mástiles de las antiguas carabelas españolas. Era como una canasta, que servía como puesto de observación desde el cual, los vigías oteaban el horizonte..

En aquel lugar, el más alto del mástil y el más inestable de la nave, se sentía en mayor magnitud, el movimiento lateral de los barcos de vela, de acuerdo al movimiento del mar.

Al marino que enviaban a ese lugar aunque fuera por un par de horas, bajaba totalmente mareado. Se tenia como un castigo enviar a alguien al carajo, para que sirviera de escarmiento a quienes cometían alguna infracción a bordo.

De ahí parece surgir la expresión (como interjección) "Váyase al Carajo", para expresar un desacuerdo con alguien.
"Ese tipo está del Carajo", se decía del marino que por más tiempo que permaneciera en ese lugar, no se sentía afectado por los movimientos laterales de la nave.

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