En cada caja de esas, está resumido un año más de miseria, de pobreza extrema, de corrupción, del reparto de los préstamos internacionales, los cuales van a dar a las cuentas privadas de Alí Babá y su decenas de ladrones.
En esas cajas, está contenido el desespero de una nación que ha sido traicionada por los malos alumnos de un prócer, como lo fue el profesor Juan Bosch, creador del partido que se ha cagado en este país; que ha llevado a tan malos dominicanos al poder y que se han hecho multimillonarios exprimiendo los fondos de las arcas del Estado.
¿Quién le iba a decir a los que en el 1996 confiaron en que, votando por Leonel, llevarían a un hombre capaz de hacer las transformaciones que tanto cacareó? ¿Quién carajos le iba a decir que ese hombre iba a salir tan malo; no se imaginaron que ese hombre quien tanto criticaba la corrupción de los gobiernos de Balaguer se iba a convertir en el verdugo de este pueblo.
Yo no voté por él, no lo hice por nadie esa vez; tampoco voté en el 2004, porque no vi con buenos ojos que se modificara la constitución para repostularse en la presidencia, como lo hizo el presidente de entonces; no me presté para acudir a ese tan ignominioso acto, tan común en este país.
A mi no me engañó Leonel con sus poses de "predestinado", porque ya en la década de los ochentas cayó en mis manos una edición del periódico del PLD (Vanguardia del Pueblo), donde este insensato decía algo así como que, "en un discurso político, no importa que lo que se diga sea una mentira, porque lo que en verdad la gente toma en cuenta para su aceptación, es la manera de usted pronunciarlo, tomando las poses necesarias........"
Se refería a la telegenia, que a su modo de ver, es decir una mentira de manera elegante con la convicción de que el pueblo la va a creer. Así sucedió, el pueblo le creyó y se jodió.
Cuando leí eso, me dije: "he aquí un farsante que no creo que pase de lo que ahora es, un abogaducho teórico de poca monta, cínico y sin futuro político.
Para mi, el pelotero Jullián Javier, fue el mejor segunda base del beisbol dominicano y uno de los mejores de grandes ligas quien agotó muchísimas temporadas con los Cardenales de San Luis: Javier era muy rápido "pivoteando" la bola hacia primera base para complear una "doblematanza".
Viendo al insensato y multimillonario presidente nuestro repartiendo LAS CAJAS DE LA DESVERGÜENZA PRESIDENCIAL, a los pobres, me doy cuenta de que Julián Javier le queda corto en el pivote a nuestro aéreo presidente Alí Babá.
Leonel agarra la caja que le pasa uno de los peones (regularmente uno de la banda de ladrones de Alí), la pivotea hacia un infelíz, que la recibe con todo el ¿agradecimiento? del mundo, aunque éste, por lo bajo le esté diciendo al presidente: ¡Mal rayo te parte, maldito corrupto, en Mayo nos vemos!
Segun me dicen, el contenido de la ignominiosa caja es el siguiente:
1) Ponche Crema de Oro
2) Azúcar
3) Habichuelas negras
4) Un Palo viejo
5) Un vino Los tres mosqueteros
6) Arroz
7) 1 lata de Gandules
8)Una lata de salsa de tomate
9) Una funda de leche en polvo
10) Una funda de dulces
11) Harina de maíz
12) Una botellita de aceite
13) Una funda de espaguetis
¿Con esa inmundicia comestible es que Leonel y el PLD piensan reducir la gran ventaja que le lleva Hipólito a su candidato? No sea usted pendejo, ombe. Pero no se llamen a engaño, pues el próximo ASISAZO del PLD y la encuastadora ASISA, tomarán esta ignominia como referencia, para colocar a su candidato por encima del 55 por ciento de la intención del voto.
Sólo esperen a Enero o a Febrero, y verán lo predecible que es esa pandilla de gavilleros del palacio.
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