Por Henry Osvaldo Tejeda
Quiero comenzar este artículo diciendo, que en esta ciudad de La Romana, tanto los choferes de carros públicos (en menor grado), los sanguinarios choferes de las guaguitas de Los Mulos (ahí si hay que joderse), como los motoconchos (éstos, en un buen porcentaje), son graduados violadores de las leyes de tránsito.
Comienzo así, para que no vaya un programero televisivo, radial, o cualquier "saltapatrá" vestido de gente, o aparentando serlo, a pretender confundir lo que diré, ni a venir a enseñarme la ley de tránsito, como que estoy apoyando las violaciones de los pelafustanes del concho.
Los menciono solo como referencia, porque el meollo de lo que quiero decir es, lo que hace y no hace AMET en tiempos normales y "anormales", si así se le puede llamar a una campaña electoral.
Desde Enero de este año, es decir, meses antes de las elecciones de Mayo, los motoristas vivían felices con su programa de violaciones a la ley, porque las órdenes de acoso hacia ellos cesaron momentaneamente, ya que a ese segmento de la población, no se le podía enemistar con el gobierno simplemente porque eran tiempos de elecciones. 20 mil motoristas, representan unos 30, o 35 mil votos.
Los agentes de AMET no los paraban ni viéndolos comerse la luz roja de los semáforos como regularmente ocurre, se hacían los desentendidos cuando los motoristas transitaban en vía contraria, es mas, posible que hasta los aplaudieran si los veían ¨calibrando¨ (levantar el motor de alante, para solo correr en la rueda de atrás). ¡Que joder!
Los AMET, podían ver cuatro y hasta cinco personas en un motor, y nada sucedía; del casco protector ni hablar; pararse en las esquinas ¨en paquetes¨ obstruyendo el tránsito vehicular y peatonal, no era ningún problema; echar carreras en las calles de la ciudad tampoco les llamaba la atención y menos ahora, que se han graduado Suma Cum Laude en jugar con sus celulares Alcatel, mientras "trabajan".
Pero ahora, que el gobierno anda detrás de dinero, cual si fuera un burro "recho" detrás de una burra, pareciera como que el único problema del tránsito en el país es, que los motoristas no tienen casco protector.
Hoy vi en televisión a un programero, al que precisamente le habrán regalado "el librito" de la ley de tránsito, y con todo el "postín postizo" que le caracteriza, empezó a pontificar como todo un leguleyo. ¡Que Joder!
Todas las violaciones que he mencionado, regularmente no son perseguidas, por eso es que la población le ha cogido "tirria" a esos agentes, y puedo apostar mil pesos a cabo'e túbano, que si en estos momentos todos los motoristas del país tuvieran su casco protector, ninguna de esas infracciones mencionadas fueran perseguidas, porque además de que la línea es casco y solo casco, sencillamente, ellos no están en eso y solo menean el culo cuando desde las alturas le tocan un son de 4 ruedas para que empiece la zafra de acosos por: el Marbete, la Revista, el Seguro, el Vidrio tintado, el Botiquin, el fullín, el jodiendin, el Bimbilin y hasta "El impuesto del chancecito", mas 100 pesos.
Hagamos un ejercicio. Si en esta ciudad hay 50 mil motoristas (por poner un número), acosarlos por violar la luz roja no le proporcionaría gran dinero al gobierno por concepto de multas, ya que no son todos los que se comen la luz roja; igualmente por "parquearse" mal, por ¨calibrar¨ y por no llevar luces entre otras "pendejaitas" nimias, ninguna de esas violaciones a la ley deja cuartos, la mejor manera del gobierno recaudar un buen dinero es, cuando los que no tienen casco, que puede ser el 60 por ciento de esos 60 mil motoristas violadores, cuando son obligados a comprarlo, ahí la cosa cambia.
Yo digo, que deben ser obligados a comprar sus cascos, porque si eso es lo que manda ley, eso debe hacerse pero que las autoridades por lo menos, guarden las apariencias. ¡carajo, "también y to"!
Si este desorden sigue así (de parte y parte), esos violadores van a tener que andar en burros, pero ya no serían motoconchos, sino, "Burroconchos". Aún así, Impuestos internos buscará la manera de multarlos, solo vean la foto del "burroconcho".