jueves, 10 de diciembre de 2015

LAS ARENGAS DE BARRICADA Y LAS PROMESAS DE CAMPAÑA NO CALAN.


Por Henry Osvaldo Tejeda

Este trabajito lo he hecho de puro corazón, sin deseos de molestar a nadie, al contrario, quiero avenencias, esto me salido de la impotencia, del descontento y de no poder hacer otra cosa para salir de este tormento morado. 

Lo aclaro, porque sé que hay unos cuantos disociadores que no quieren alianzas pues, para ellos no hay más nadie que sirva en este país más que su líder. Esos pueden esperar, el pueblo no.

Leí hoy otra arenga política, y con esta van mil emitidas desde un cómodo cuarto frío. Esto leí: 
"Guillermo Moreno llamó a la población dominicana a que se una para “enfrentar la estructura corrupta que caracteriza los gobiernos peledeistas”


Qué contradicción, el resto de la oposición le pide que se una a la lucha en conjunto y él se niega. Entonces?
Con arengas solitarias y promesas de este y otros candidatos, no vamos para parte alguna, hay que  sintonizar con el pueblo, unirse a sus luchas y no limitarse a dar declaraciones esporádicas, ni querer hacer verano como una golondrina sola, o ser justiciero como un llanero solitario.

La mayoría de sus seguidores son de clase media, por tanto, por más que sea acogotada esa clase, pueden mantenerse sobreviviendo aunque sea haciendo malabares, pero los pobres, los infelices del pueblo llano no tienen capacidad para sobrevivir más gobiernos del PLD, porque ya llevan la corrupción en los tuétanos.

A guillermo lo necesitan los desprotegidos, los que bucearon para comer hoy y que no saben si van a comer mañana, no pueden esperar más tiempo sufriendo las consecuencias de un gobierno tan malo y corrupto como el de Danilo y su decadente PLD. El pueblo necesita quién se preocupe por él; el país va a la deriva.

Ya el pueblo está harto de caudillismo mesiánico, ya vimos eso en la izquierda dominicana desde los años sesentas y setentas, donde cada grupúsculo se creyó ser el mejor y tener la verdad absoluta. 

Ahora mismo, a lo único que el pueblo le caería atrás sin pensarlo dos veces, es a un pelotón, una compañía, un batallón, o un regimiento que se quisiera casar con la gloria sacando la gavilla del poder. 
Usted puede ser cabeza de león, solo si se sienta a negociar con el resto de la oposición, tomando en cuenta su gran aceptación en el pueblo, pero tampoco pensando en que  Alianza País es líder de la oposición y que usted es el dueño de la verdad absoluta.

 Ya es tiempo de decirle país, cuál es su pensar con respecto a una alianza con el PRM que es sin dudas, el partido líder de la oposición.

Hay una mesa de diálogo esperando por usted, pero ir a hacer lo mismo que hizo el que vendió al PRD (perdone la necia comparación, pero no es de fondo, sino, de actitud), quien no quería alianzas porque ya tenía sus planes con el PLD pero que, para llenar las apariencias y de paso echarle la culpa al PRM de no querer aliarse con él.

El traidor de marras, un  repudiado mercader de la política decía, que estaba dispuesto a negociar pero ponía como condición que lo señalaran a él como el candidato presidencial, cosa de la que estaba seguro que le iban a negar. Pensó que así que quedaba bien ante el pueblo.  ¿Qué quiero decir?  No exigir más que lo que se tiene para dar.

El pueblo lo observa, y lo necesita a usted ahora, no después que le cuenten los votos porque si le da la espalda a tanta gente que cree en usted, e insiste en
ser intransigente y renuente a una alianza real, lo menos que le puede pasar es que en el 2020, tenga que volver a recoger firmas para no perder su reconocimiento ante la JCE. 

Soy un admirador suyo y sé de la seriedad de su proyecto y de su propuesta para el país, y sé que es la mejor que hay en estos momentos, pero ahora es cuando usted tiene que poner los pies sobre la tierra y luchar por lo posible, no por lo ideal, ni por lo que le convenga a un partido ni al proyecto personal de un líder. Lo ideal, se construirá desde el poder.
A usted lo están esperando en la mesa de las negociaciones, y no es para repartir pasteles, sino, para llevar un programa de gobierno común, del que puede sacar  buen partido de esa mesa, para que desde un posible gobierno, pueda usted sentar las bases para llegar al poder en el 2020. Hablo con el corazón en las manos, y aún creo en usted pero, ¡apúrese que el tiempo apremia y faltan muy pocos meses para las elecciones. ¡Mis respetos!

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