ROBOS DEL SENADOR Y EL "NO HA LUGAR": CRÍMENES DE LESA PATRIA

Por Henry Osvaldo Tejeda

Los actos dolosos del beneficiado senador, por el también ya famoso "No ha lugar" de un juez corrupto, no queda solamente en haberse vuelto un Rockefeller de la noche a la mañana al robarse tantos miles de millones de pesos de los recursos públicos, hay mucho más que eso.

Ahí tenemos el bochornoso hecho de "asquerosear" casi todos los valores morales con que cuenta una sociedad para su buen convivir, además de haber dejado en la psiquis de la juventud, todo un manual de cómo robarse los fondos públicos, y salir avante.

Otra es, el crimen de haber dejado morir tanta gente enferma en los hospitales públicos, por robarse el dinero que debió ser destinado para la compra medicinas; llevar tanta gente a la miseria matándolas de hambre por cogerse los fondos que debieron ir a construir soluciones vía planes sociales que por lo menos, ayudaran a paliar la desastrosa situación de miseria de los sectores más empobrecidos del país. 

Lo que ha hecho ese señor y muchos otros de la llamada gavilla palaciega del PLD, apoyado  por el ex presidente Fernández quien ha dicho que él este Dillinger moderno es su hijo adoptivo, haciéndose de la vista gorda mientas se cometían  tan grandes asaltos a las arcas del Estado considerados como, un crimen de lesa patria.


 Pero si hay algo que no se le puede perdonar, es el hecho de traicionar al pueblo y luego estrujarle en la cara su inmensa e inexplicable  fortuna, adquirida de la forma más burda y asquerosa, y encima de eso, evadir el pago de impuestos usando toda clase de ilegales artimañas que ahora resultan bendecidas por un juez venal.

Aunque no lo diga ninguna puta ley, robarse el dinero que el pueblo paga con tantos sacrificios para mantener al Estado, con la esperanza de que le seas devuelto en obras de bien social?

Acaso no es un abuso de lesa patria, enraizar en la cabeza de la juventud, que es el hormigón de la sociedad futura, la política del menor esfuerzo, teniendo como norte el robo vulgar del dinero del pueblo?

Finalmente, no es acaso un abuso de lesa patria, establecer la cultura del apandillamiento político al organizar una estructura mafiosa y que, quién debe velar por evitarlo, sea precisamente un miembro de la misma la misma pandilla?

Como aún no ha terminado el show Bautista/jueces venales, por estar pendiente  una apelación del Ministerio Público al asqueroso fallo de un juez político y corrupto, en caso de llegarse al fondo del expediente (algo casi imposible), el  gavillero que nos ocupa en este trabajo, debería ser condenado de manera aleccionadora, despojado de los bienes mal habidos, y cuando cumpla la pena, deportarlo hacia China junto a su padre adoptivo con una nota que diga: "¡Hágase con ellos, lo que se acostumbra en ese país". (En China los linchan sin mucho ver)

   Ya veremos luego, qué hacer con los gavilleros, tan amigos de robarse los fondos públicos; ese tipo de lacre está que regado en todo el territorio nacional.