miércoles, 4 de abril de 2012

CHÁCHARAS: LA MUJER, PRODUCTO DE PROMOCIÓN PARA TODO

Anuncio de Masturbin para jevitos
Por Henry Osvaldo Tejeda

 Si las cosas siguen como van, la situación del país puede ponerse tan mala que las casas licoreras, en vista de las malas ventas registradas, podrían lanzar al mercado largos spots televisivos y radiofónicos para tratar de convencer a la gente de que consuma sus productos.

Cuando las cosas se ponen así, las empresas sacan anuncios publicitarios usando todos los recursos que se les antoja: mujeres en cueritas en pelotas, "muchachoncitos" con la pretina del pantalón en la misma raja del fullín, otras chicas con sólo un para de tiritas en el cuerpo bailando una maldita vaina que le dicen música, dando todos los que ellas creen que son "movimientos artísticos", pero no son otra cosa que "Golpes de perros". El cuerpo de la mujer es el atractivo para vender.
Anuncio de guayos Guayubin

Si promocionan una silla, una cama, una abanico y hasta un guayo, tienen que ser a través de una mujer.
Si quieren vender una sombrilla, tienen que poner una mujer desnuda en la playa, y hasta el palo de la sombrilla lo promocionan, haciendo que la chica haga ademanes con el bendito palo de la sombrilla como si se estuviera haciendo el "haraquiri", pero un poco más abajo de donde se lo hacen los japoneses.

Si promocionan una sazón, te presentan a una chica meneando las nalgas, como si estuviera sazonando un coito de gallo, con todo y ropa. Pareciera como si fuera indispensable la figura de una mujer para cada anuncio.
Nunca he visto un anuncio de desodorante Deporte, el que usan los haitianos. Me gustaría ver qué harían para promocionar ese "machete anti grajo".

Los anuncios también podrían ir dirigidos con un mensaje de miedo, como hacen los evangélicos cuando van a los hospitales "a convertir a los enfermos" (¿...?). Primero los amenazan diciéndoles que si no se  arrepienten de sus pecados, se los va a llevar el Diablo y que allá arriba no tendrán lugar porque los bancos de la gloria los ocuparán los que desde ahora se conviertan y acepten a.....bla, bla, bla (no seguiré con esta parte porque en La Romana hay mas evangélicos que motoconchos)

En fin, veíamos los anuncios más raros., Algo como esto:

"¡Atención pueblo dominicano! Recuerde usted que el agua es vida, no la desperdicie; cuando usted vaya a un "echado de agua", sugiérale a los dueños del "bautizante" que, en lugar de agua, le echen "Romo Catruta";
Usando Catruta Añejo, su bebé quedará bautizado  pero también, quedará desinfectado por un sólo precio".

No se imagina usted, cuan barato le sale el galón de "Romo Catruta" además de tener la particularidad de que le matará los piojos al bautizado, algo que no hace el agua".

No, no piense en que el muchacho le salga borrachón, no tenga miedo de  que el niño termine siendo un mujeriego, el ron que le ofrecemos no es de aquel famoso que tiene una banderita, del cual se dice que quien se da un jumo de él, o fornica o pelea".
Nooooo, ese no es.

¡Prostituta dominicanas!  Para ti también tenemos una oferta especial. Tu que bregas con hombres "jediondos" e infestados de bichos raros y con todas las vainas malas que se cogen en la calle, te  ofrecemos un ron especial que es "un cuchillo" para las ladillas.

Ya no te bañes mas con agua, el agua se hizo para beber. ¿No has escuchado alguna vez que, la tercera guerra mundial se librará por el dominio y la hegemonía de las grandes zonas acuíferas?

Si usted es diabético, ensaye por una semana dejando esa fastidiosa jeringa y ajústese un pote de "Romo Catruta". No le coja miedo a sentirse mareado, no es que le ha bajado ni subido el azúcar, es que el "Catruta" le está sacando esa mala leche acumulada durante años.
 Si en una semana no se cura, pruebe con el "Catruta Blanco o Dorado".

No siga desperdiciando el agua, beba romo, báñese con romo, cocine con romo, el romo mata los parásitos, beba romo, beba romo y ya verá que con romo, la vida es mas sabrosa y el que no se pueda beber... ¡Ùnteselo y dígale adiós al grajo!



No hay comentarios:

Publicar un comentario