¡ESE BENDITO DIEZ POR CIENTO!, ¿HASTA CUANDO?

por Henry Osvaldo Tejeda

En Noviembre del 2008, escribí mi primer artículo de opinión, y lo hice en el blog de Elpidio Tolentino tratando el tema del diez por ciento que deben recibir los ayuntamientos del país como lo ordena la ley creada para tal efecto.

Como han vuelto al tapete los reclamos de los cabildos del país, aglutinados en FEDOMU (Federación Dominicana de Municipios) con el Doctor José Reyes como su presidente, voy a "traer por las greñas" algunos párrafos del referido artículo.

"La gran mayoría de los ayuntamientos del país están en manos del partido de gobierno, y en la medida en que estos ayuntamientos se van derrumbando y perdiendo credibilidad ante el pueblo por la falta de recursos para realizar obras, en esa misma proporción se va desgastando el gobierno, empecinado en violar la ley del diez por ciento".

En la ocasión, "los actos que se celebraron en la geografía nacional para exigir ese diez por ciento, debe tomarlo el gobierno como una señal de lo que puede pasar en las próximas elecciones congresuales y municipales, ya que, por mas popularidad que tenga un síndico en su comunidad, no quita que la oposición saque capital político de la situación y así darle un susto a las actuales autoridades".

"Aunque a decir verdad, al Dr. José Reyes, es muy difícil, casi imposible que alguien pueda ganarle en las próximas elecciones, porque el pueblo se ha dado cuenta que en él, tiene a alguien que le duele su municipio, su provincia, que no engaña a nadie y que no actúa como un político de estos que nos gastamos, y que es alguien a quien le afecta el dolor ajeno, es alguien que lleva al terreno de los hechos lo que una vez escribió Terencio cuando dijo: "Nada humano me es ajeno".

Decía en esa oportunidad, que el gobierno promulga una ley, en la que se le aumenta un 15 por ciento a los empleados públicos, pero jamás se preocupó por los empleados de los ayuntamientos que esperan todavía ese pírrico aumento. Solo hay que ver esos viejitos barriendo las calles, cayéndose por los achaques fruto del hambre y la miseria, enfermos en su mayoría, contando solo con la ayuda adicional que le pueda brindar el Síndico, ya sea autorizándoles recetas, o regalándoles un poco de dinero en efectivo, como he podido ver infinidades de veces; y es que lo que ganan, no les alcanza ni para medicinas; los puedes ver tomando un pequeño receso en su labor, sentados en un contén caliente, dándole un descanso a la miseria que cargan en las espaldas.

Esto es injusto, el gobierno debe saber que las gentes son el país, por lo que debe creer mas en la palabra "Gente", y olvidar por un momento esas bonitas palabras como: "brecha", "Cumbre", "Virtual", "Metro", "OEA", "ONU", entre otras pendejadas mas sin sentido práctico en estos momentos. Es hora de evitar que mas infelices caigan en la indigencia, aunque a decir verdad, de la vida que llevan a la indigencia, lo único que los separa es, como dice el populacho, "una mano de pintura".
Es hora de pensar en las gentes.